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2h 16min | Inglés | Dir. Richard Curtis | Universal Pictures | Comedia Romántica

Realmente Amor desarrolla distintas historias de amor en torno a la Navidad.

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RESEÑA

Umami. Película ideal para los amantes de las historias entrelazadas. Aunque, lo particular de esta antología es que cada una de las historias vive por su cuenta, sin depender de la otra. Es una comedia romántica con escenas divertidas y románticas para ver más de una vez en tu vida.

Chocolate completo. Realmente Amor representa distintas formas de relaciones de parejas. Va desde amor entre jóvenes enamorados a amores prohibidos. Cada una de sus historias tiene su buena cantidad de romance, lo que la clasifica como película romántica por excelencia.

*La siguiente reseña podría contener SPOILERS, por lo que leerla, podría arruinar el disfrute de la trama por parte del lector. Si continúa es bajo su propia responsabilidad.*

Cada actor logra ganarse el corazón del espectador con sus representaciones. Lo que dice mucho de sus actuaciones, ya que hablamos de una película con un reparto increíblemente numeroso. Todos parecen formar parte de una gran familia.
 

Existe una excelente sinergía entre los personajes, a pesar de estar separados por historias distintas, logran trabajar y conectarse todos a la perfección.
 

Complementando lo que decía al principio, los actores logran una simpleza al representar sus roles y, es fácil identificarse con cada uno de ellos y sentir lo que siente cada personaje.
 

Cada historia resulta independiente una de otra y, a pesar de contar varias historias, es fácil de comprender cada una. Tiene sus saltos entre historia e historia, es decir, no se cuentan de manera lineal, sino que se dan distintos saltos entre las historias dentro del mismo tiempo. En este caso, todas giran en torno a Navidad. Todas las historias tienen su cierre, lo que significa terminar con broche de oro, ya que no queda ningún cabo suelto. Todo resultó ser perfecto.
 

El trabajo de escenografía y vestuario es un gran punto a destacar.
 

Los escenarios, naturales o urbanos, decorados y adaptados al frío invierno, quedaron perfectos para cada escena.
 

En cuanto al vestuario, diría lo mismo. Sacos o abrigos, o la ligera pijama o ropa para estar en casa, se combinaban perfectamente con la ocasión.
 

De los escenarios más memorables que recuerdo de la película, me quedo con aquel en donde se realiza el evento del coro en la escuela, las bellas casas cuando David (Hugh Grant) busca a Natalie (Martine McCutcheon) desesperadamente en Navidad. Tampoco cambiaría el simple e icónico espacio en el aeropuerto al inicio y al final de la película.
 

Me suele costar bastante elegir una escena favorita, cuando me gustaron y me sentí identificado con varias historias. Pero, debo destacar varias escenas.
 

La principal es cuando llega la Navidad en la historia de Mark (Andrew Lincoln) y Juliet (Keira Knightley), cuando este le confiesa su amor por ella. Puede tomarse un poco raro si se piensa bastante en esta historia, ya que es un amigo confesando su amor por la esposa de su amigo. Pero, me parece que, por la ternura e inocencia con la que lo manejan te encariñas bastante con los personajes y la historia. Desde el principio esta historia me resultó bastante atractiva.

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La segunda escena es de la pareja que se forma con David y Natalie, Primer Ministro y su secretaria. Resulta ser una historia bastante tierna y romántica. Además, que el personaje queda perfecto para ser representado por un actor de la talla de Hugh Grant, en cuanto a papeles románticos.

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La tercera escena memorable es cuando Sam (Thomas Sangster) se escabulle en el aeropuerto para encontrarse con Joanna (Olivia Olson). Un amor jovial, entre niños que, por instantes parecen más cuerdos que los propios adultos.

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Hay varias menciones honorables para algunas escenas más que recuerdo, como la historia entre Jamie (Colin Firth) y Aurélia (Lúcia Moniz). Jamie se obligó a aprender portugués en un curso intensivo para poder pedirle matrimonio. Ambos están enamorados, pero no hablan el mismo idioma por lo que les resulta difícil entenderse. Por otro lado, una buena escena es cuando Colin (Kris Marshall) llega a Estados Unidos y enamora casi que, de inmediato, a varias chicas, dejando como metáfora que, no hay que darse por vencido en el amor ya que, a veces solo consiste en probar espacios o ambientes distintos.

Realmente Amor es una película que demuestra que el amor está en todas partes. Recomendada para verla en familia, con pareja o solo. Esta película te hace creer en el amor. Divertida y tierna. Es una película que se disfruta siempre, sin importar el pasar de los años.

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© 2021 por Renny Antonio Morales Caro, en Wix.com

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